CHIHUAHUA.– El PRI de Chihuahua, con Alejandro Domínguez al frente, pegó el grito al cielo y exigió que el Gobierno Federal deje de hacerse pato con la sequía brutal que está azotando al campo. En San Francisco de Conchos, donde la Presa La Boquilla anda con el agua por los talones (apenas 14%), la cosa ya está que arde: sin agua, ni pesca ni ganado aguantan.

Domínguez dijo que el gobierno debe ponerse las pilas ya, con lana y acciones que se noten, porque esto no es capricho: miles de familias están en la cuerda floja. En su gira por La Cruz, Camargo y San Pancho, el PRI dejó claro que no va a soltar el tema hasta que se vea respuesta. Porque mientras el campo se seca, en Palacio Nacional nomás no cae ni una gota de interés.