La diputada Edith Palma se aventó una propuesta con toda la enjundia en el Congreso del Estado: reformar la Ley de Educación pa’ que las comunidades indígenas no sigan siendo las últimas en la fila. La idea es que se escuche, se respete y se enseñe su cultura y lengua en las escuelas, sin que nadie los vea raro ni los discrimine.

Con cambios a la Constitución local y a varios artículos educativos, quiere que se capacite a maestros indígenas, se les den becas a los morritos y se preserve el idioma sin andar viendo cuántos lo hablan.