Qué juerte estuvo la sesión del Congreso, ¡casi se agarran a golpes! Y ojo, no apoyamos la violencia, pero si hubiera más de eso… bueno, no estaría tan mal. Pero honestamente, no lo necesitaban, porque al final ya dejaron al diputado Jorge Soto tirado en el suelo. ¡Se dijeron de todo! Mentirosos, traidores, vende patrias, cobardes, ignorantes, cínicos, dictadores… ¡solo les faltó decirse pendejos!, bueno si se dijo esa palabra Pero así estuvo el ambiente, bien caliente.
Lo que sí es seguro es que si un grupo vota por algo, pues ya votaron. ¡No pueden decir que los obligaron! Y aunque algunos se aferran a decir que sí, pues no es así. Eso sí, otra cosa es si votaron a favor de la reforma al Poder Judicial por orden de su partido… upsss. Pero mentiras no son, ¿verdad?