MADERA, Chih.— Tras años de olvido, la Comisión Estatal de Desplazamiento Forzado Interno llegó con todo al municipio de Madera para atender a 35 núcleos familiares —130 personas entre adultos y menores— que han tenido que dejar sus comunidades por la violencia. La jornada, realizada este 7 de mayo en la Presidencia Municipal, reunió a representantes de casi todas las dependencias estatales, desde Derechos Humanos hasta la Fiscalía, pasando por Salud, Educación, Seguridad Pública y hasta el DIF.
Norma Ledezma, comisionada de Atención a Víctimas, aseguró que el objetivo es darles una mano real a estas familias, con atención coordinada y sensible. Durante la jornada, se ofrecieron consultas médicas, despensas, frijol, maíz, cobijas y hasta dulces para los niños. Todo muy bonito, aunque la verdadera pregunta es: ¿cuánto tiempo más tendrán que esperar estas familias para dejar de depender de jornadas esporádicas y empezar una nueva vida digna en paz?