El país está en vilo mientras los canadienses se preparan para elegir a sus 343 diputados, quienes serán los encargados de escoger al próximo primer ministro. Sin embargo, las últimas horas de la campaña han quedado marcadas por una tragedia: un atropello masivo en Vancouver que cobró la vida de nueve personas y dejó decenas de heridos. El autor, un hombre de 30 años, está bajo custodia y, aunque la Policía ha descartado el móvil terrorista, el impacto en la provincia de Columbia Británica y en el resto del país sigue siendo incierto.

 

En el marco de esta tragedia, la campaña electoral había estado centrada en la figura de Donald Trump, cuyo impacto ha sido crucial en el giro de las encuestas. La guerra comercial y las amenazas de anexión por parte del presidente de EE. UU. han favorecido al Partido Liberal, mientras que el conservador Pierre Poilievre, cuyas políticas recuerdan a las de Trump, ha visto caer su apoyo. Mientras tanto, otros temas como el alto costo de vida, la falta de vivienda asequible y la migración han quedado en segundo plano ante la amenaza que muchos canadienses perciben con la retórica expansionista de Trump.